manifiesto

Creemos en el valor del tiempo y sus ciclos naturales; respetamos los procesos como muestra de calidad y compromiso con los materiales nobles, las texturas y el oficio de lo hecho a mano con dedicación.

Nuestra propuesta integra sutilmente los recursos nobles disponibles para componer y confeccionar piezas simples, versátiles y amables a tu calce, tacto y movimiento. Consideramos la belleza como un reflejo genuino y natural de lo estéticamente imperfecto, justamente ahí la materia adquiere vida con la sutileza y el poder de tu identidad.

Amamos la belleza de lo original (origen), y real. La confección de nuestro trabajo es parte de una composición intuitiva y sensible al contexto que estamos observando y sintiendo como parte de nuestro sello y razón de ser.

Cada prenda es resultado de una relación afectiva con la materia con la que vivimos diariamente. A través de lo hecho a mano le damos vida, energía y continuidad al lenguaje simbólico que se contiene en ella: colores, texturas y detalles que suman en coherencia con nuestro Propósito.

Valoramos la integración armónica desde lo simple, lo genuino y versátil que nos va mostrando la vida en constante movimiento y evolución, siendo nuestro objetivo fundamental: la comodidad de las piezas y prendas que salen desde nuestro taller.

Es importante saber que lo que hoy está disponible puede volver en otro momento, será similar pero no igual, la tela será tan deliciosa como la anterior, en colores parecidos, con sutiles cambios propios de su identidad.

La realidad está ajena a la perfección; más bien es la suma de detalles que genuinamente se integran para armar una armonía que representa tu comodidad; reconociendo en ella una belleza y estética limpia, honesta y perdurable.

Somos sensibles a los detalles y la inspiración que nos entrega la permanente adaptación y contemplación de la naturaleza y el entorno.